Tipos de desfibriladores. Conoce cómo se clasifican los desfibriladores externos. Toda la información sobre cardioprotección aquí.
Desfibriladores: tipos, funcionamiento y su papel clave en la cardioprotección
En situaciones de emergencia cardíaca, contar con un desfibrilador externo automático (DEA) puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Por eso, comprender cómo funcionan estos dispositivos, qué tipos existen y cuál es su papel en la cardioprotección de espacios resulta fundamental tanto para profesionales como para ciudadanos en general. Además, su presencia en lugares públicos se ha convertido en una necesidad creciente, especialmente en espacios con alta afluencia de personas.
¿Qué es un desfibrilador y cómo funciona?
Los desfibriladores son dispositivos diseñados para restaurar el ritmo cardíaco normal cuando una persona sufre una parada cardíaca súbita o una parada cardiorrespiratoria. Estos aparatos utilizan electricidad para reiniciar la actividad eléctrica del corazón, lo cual, en muchos casos, es la única manera efectiva de salvar una vida.
Por lo tanto, cuando el corazón entra en un ritmo caótico o deja de latir de forma eficaz, el desfibrilador administra una descarga eléctrica controlada que interrumpe esa actividad anormal, permitiendo que el corazón recupere un ritmo compatible con la vida. Esta descarga se aplica mediante electrodos o palas, dependiendo del tipo de desfibrilador.
La importancia del desfibrilador en la cardioprotección
De hecho, el desfibrilador es el elemento central de cualquier espacio cardioprotegido. Aunque se trate de un dispositivo eléctrico relativamente sencillo de utilizar, su correcta ubicación, conservación y manejo son factores decisivos a la hora de actuar ante una emergencia.
Asimismo, es crucial recordar que un desfibrilador mal conservado o manipulado de forma incorrecta puede volverse inútil o incluso peligroso. Por consiguiente, estos equipos deben almacenarse en lugares visibles, accesibles y protegidos, cumpliendo con los requisitos de mantenimiento preventivo y con su correspondiente formación asociada.
Tipos de desfibriladores según su función y uso
Ahora bien, no todos los desfibriladores son iguales. Podemos clasificarlos en varios tipos según tres criterios principales: el nivel de descarga, el grado de autonomía y su ubicación (interna o externa). A continuación, explicamos cada una de estas categorías en detalle.
Según el nivel de descarga: monofásicos y bifásicos
Por un lado, los desfibriladores monofásicos son los modelos más antiguos. Funcionan aplicando una descarga en una única dirección, lo que requiere más energía y, por ende, puede producir mayores lesiones en el tejido cardíaco. Estos dispositivos aplican cargas sucesivas de 200, 300 y 360 julios para intentar reiniciar la actividad eléctrica del corazón.
Por otro lado, los desfibriladores bifásicos son más modernos y eficaces. Aplican la descarga en dos direcciones: la corriente va desde un electrodo hasta el otro, y luego se invierte. Esto permite utilizar menos energía, lo cual minimiza los daños celulares y mejora las probabilidades de éxito en la desfibrilación.
Según su autonomía: manuales, semiautomáticos y automáticos
Además, podemos clasificar los desfibriladores según el grado de intervención humana que requieren:
Desfibrilador manual
Este tipo de desfibrilador es exclusivo para uso hospitalario o médico. Requiere conocimientos avanzados, ya que el profesional es quien decide la intensidad de la descarga y el momento de aplicarla. Por lo tanto, su uso se restringe al personal sanitario entrenado.
Desfibrilador semiautomático (DESA)
El desfibrilador externo semiautomático (DESA) es el más utilizado en la cardioprotección de espacios públicos. Cuenta con electrodos adhesivos (en lugar de palas) y guía al rescatista con instrucciones sonoras y visuales. Una vez detectado un ritmo desfibrilable, el dispositivo indica que se debe presionar un botón para aplicar la descarga.
En consecuencia, es ideal para que lo usen personas sin formación sanitaria previa, ya que el equipo asume casi todo el proceso.
Desfibrilador automático (DEA)
El DEA automático es similar al semiautomático, con la diferencia de que aplica la descarga sin necesidad de intervención del rescatista. Basta con seguir las instrucciones y colocar correctamente los parches; el aparato determinará cuándo y cómo actuar.
En resumen, este tipo de DEA ofrece máxima simplicidad de uso, lo cual es especialmente útil en situaciones de alta tensión emocional.
Según el lugar de colocación: internos y externos
Por último, según su ubicación, distinguimos entre desfibriladores internos y externos.
Desfibrilador interno (DAI)
El Desfibrilador Automático Implantable (DAI) es un pequeño dispositivo que se implanta quirúrgicamente bajo la piel del paciente, cerca de la clavícula. Su función es monitorizar continuamente el ritmo cardíaco y aplicar una descarga interna en caso de detectar una arritmia maligna. Por lo tanto, está indicado en pacientes con alto riesgo de muerte súbita.
Desfibrilador externo
El DEA externo es el más común y el más instalado en espacios públicos o privados. Permite monitorizar el ritmo cardíaco a través de electrodos colocados sobre el tórax, y administra la descarga solo si detecta un ritmo desfibrilable. En consecuencia, su aplicación inmediata en casos de parada cardiorrespiratoria es determinante para la supervivencia.
Los tres pilares de la cardioprotección: instalación, mantenimiento y formación
Aunque disponer de un DEA es esencial, no es suficiente para hablar de un espacio cardioprotegido. Para que un entorno esté realmente preparado ante una parada cardíaca, deben cumplirse tres pilares fundamentales:
- Instalación adecuada del desfibrilador: en un lugar visible, accesible y señalizado.
- Mantenimiento regular del equipo: control de baterías, electrodos, pruebas de funcionamiento y revisiones técnicas.
- Formación en soporte vital básico (SVB): los usuarios deben saber cómo actuar en los primeros minutos, aplicar RCP de calidad y utilizar el DEA correctamente.
En efecto, estos tres componentes trabajan juntos para garantizar una respuesta eficaz ante cualquier evento cardíaco.
Salvavidas Cardio: líderes en cardioprotección en España
Desde Salvavidas Cardio, llevamos más de una década trabajando en la cardioprotección integral de espacios públicos y privados. Ofrecemos soluciones personalizadas que incluyen:
- Desfibriladores DEA de última generación, con modo pediátrico y certificados CE.
- Instalación profesional con señalización homologada.
- Mantenimiento técnico integral, incluido en nuestros planes de suscripción.
- Formación oficial en SVB y uso del DEA, adaptada a cada sector.
De hecho, ya hemos cardioprotegido más de 19.000 espacios en toda España, incluyendo colegios, centros deportivos, estaciones de transporte, oficinas, comunidades de vecinos, empresas y administraciones públicas.
¿Por qué cada vez más personas instalan un DEA?
El aumento de la conciencia sobre los riesgos de muerte súbita y la importancia de actuar a tiempo ha impulsado la instalación de desfibriladores en todo tipo de entornos. Además, los precios más accesibles, la facilidad de uso y las opciones de suscripción con todo incluido han facilitado el acceso a estos dispositivos.
Por consiguiente, cada vez son más las personas, empresas y entidades que apuestan por la prevención y la seguridad cardíaca.
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En definitiva, los desfibriladores salvan vidas. Pero para que cumplan su función, deben instalarse correctamente, mantenerse en condiciones óptimas y ser utilizados por personas que sepan cómo actuar.
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