Al año mueren en nuestro país unas 30.000 personas de accidentes cardíacos, es decir, una parada cardíaca cada 20 Minutos. Un problema que supera por cuatro el número de víctimas de los accidentes de tráfico.

Se trata de una cifra desorbitada en comparación con otros países europeos donde la cardioprotección está más instaurada y los ciudadanos están más concienciados con este tema.

Los campos de Golf son lugares concurridos con un importante volumen de visitantes, esto hace que aumenten las probabilidades de sufrir un accidente cardíaco en las inmediaciones. En España podemos encontrar un gran número de Campos de Golf donde disfrutar del deporte al aire libre.

La cardioprotección en instalaciones deportivas supone una seguridad adicional para cualquier deportista o visitante. Los cardiólogos aconsejan instalar equipos de desfibrilación en todos los lugares con cierta concurrencia de público, ya que entre el 60-70% de las parada cardíacas pueden ser atendidas con una desfibrilación temprana y evitar así la muerte de la víctima.

El paro cardíaco es un problema eléctrico. Cuando el corazón late a un ritmo caótico, es decir fibrila, no puede bombear la sangre adecuadamente. De ahí la importancia del desfibrilador para poder llevar al corazón a su ritmo normal y restaurar el flujo sanguíneo adecuado.

Es muy importante aclarar que el paro cardíaco puede ocurrir a cualquier persona, en cualquier momento y en cualquier lugar.

Aunque el riesgo de paro cardíaco aumenta con la edad y en personas con problemas de corazón, un porcentaje grande de las víctimas se da en el colectivo de personas sin ningún factor conocido de riesgo. Tanto los niños como los adolescentes, los atletas y los ancianos pueden sufrir un paro cardiaco.

El Golfista de Elite, Bernard Gallacher quiere cardioproteger los campos de golf

El Golfista escocés de 72 años Bernard Gallacher sufrió en 2013 un infarto que le dejo en el hospital unos cuantos días. Después de esto el deportista comenzó una campaña con la ayuda de la PGA y el Tour europeo para instalar desfibriladores en todos los campos de Golf de su país.

Los desfibriladores aún no son frecuentes en los campos de golf, tampoco en España. Estos aparatos pueden ser manejados por personal no sanitario, con la debida formación para su correcto funcionamiento.