Desfibriladores para embarcaciones de recreo, deportivas, pesca, ferrys y barcos de transporte marítimo en general, somos empresa especializada en cardio proteger barcos de todo tipo y tamaño.
Instalar desfibriladores a bordo de embarcaciones como pueden ser los pesqueros en alta mar, una embarcación deportiva, un yate o un velero resulta absolutamente necesario para garantizar un mayor índice de supervivencia de la tripulación marinera y una mejor calidad de vida a bordo.
Cardio proteger todo tipo de embarcaciones con un desfibrilador DEA permitirá salvar la vida a cualquier miembro de la tripulación en caso de paro cardiaco repentino en alta mar.
Más que nunca, disponer de un desfibrilador semiautomático externo en estas situaciones de parada cardíaca en alta mar, se convierte en algo tan importante, puesto que las posibilidades de que llegue un equipo de asistencia médica a tiempo en mitad del océano son imposibles.
Además un factor importante que se produce en este tipo de embarcaciones y que puede aumentar las probabilidades de sufrir una muerte súbita, son las altas temperaturas en la época veraniega. La continua exposición al sol y las temperaturas altas hace que aumente la presión arterial debido al calor y producirse una insolación pudiendo derivar en un paro cardíaco.
¿Es imprescindible disponer de un desfibrilador a bordo?
Recordamos que es necesario actuar en los primeros 5 minutos ante una parada cardíaca súbita, tiempo máximo para aplicar la desfibrilación a una persona que ha sufrido un paro cardiaco repentino.
Este tiempo de 5 minutos es insuficiente para que lleguen los servicios de emergencia en situaciones en alta mar, por lo que la actuación de las personas presentes en el barco es vital para la supervivencia de la víctima.
Es por ello, que disponer de un desfibrilador externo y la correcta formación en soporte vital básico de la tripulación a bordo, y aplicar una reanimación cardiopulmonar óptima, eleva las probabilidades de supervivencia un 90%.
También entran en estos tipos de embarcaciones los ferrys, cruceros y buques de carga. Estas embarcaciones no dejan de ser un transporte de gente masiva a diario, como puede ser un avión.
Empresa instaladora de desfibriladores en ferrys y barcos de pasajeros
Esta afluencia elevada de gente de todo tipo de edades suma aún más probabilidad de riesgo de sufrir alguien una parada cardíaca. Instalar en los barcos desfibriladores automáticos (DEA), convirtiendo los ferries en espacios cardioprotegidos, aporta la seguridad a todos los empleados y pasajeros que vayan a bordo.
Además es importante que los pasajeros puedan encontrar la señalización de que se encuentran en una zona cardioprotegida, y ante cualquier síntoma, podrán contactar con la tripulación para solicitar asistencia. De manera, es igual de importante que la tripulación reciba formación, dotándolos así de la acreditación oficial para usar los DEA.
En Proyecto Salvavidas también queremos recordar que con tener un desfibrilador a bordo no basta. Es en este sector donde sin duda hace falta un mantenimiento y revisión de todos los equipos periódicamente, para asegurar su correcto funcionamiento.
Mantenimiento de desfibriladores a bordo de barcos, ferrys y buques de carga
La mayoría de las veces, al estar tiempos largos sin acercarse a las costas, estos desfibriladores pasan mucho tiempo sin revisar las caducidades de sus parches y estado de la batería.
Nuestro plan de mantenimiento de desfibriladores es la principal solución para la gestión de Programas de Cardioprotección en España, le permite cumplir con todas las normativas sobre desfibriladores con un respaldo adecuado y preparado para realizar una descarga precisa en cualquier momento.
La importancia de disponer de un desfibrilador DEA en alta mar
Claro ejemplo de la importancia de disponer en correcto estado estos equipos en todas las embarcaciones, es la noticia que ocurrió el pasado 19 de agosto donde afortunadamente 5 médicos salvaron la vida de un tripulante, pese a la falta de material de auxilio.
Tras salvarle la vida, paliaron el fallo en el protocolo de seguridad médica del barco por ausencia del material de auxilios, después de que el marinero, de unos 55 años de edad, hubiera sufrido una parada cardiorrespiratoria sobre las 6.30 de la mañana, cuando el buque estaba a una media hora de la llegada al puerto de la ciudad condal.
La anomalía llegó cuando los médicos que comenzaron a realizar la reanimación cardiaca solicitaron a los compañeros del tripulante desfallecido, que trajeran el aparato desfibrilador y el material médico del que dispusieron.
Después de buscarlo solo acertaron a traer la caja del aparato que estaba vacía. Uno de los médicos se ofreció a acompañar a otro marinero para buscar el desfibrilador y lo encontró pero estaba sin batería e inservible.
Ante una emergencia de este tipo tener un desfibrilador en perfecto estado para su uso, correctamente señalizado y ubicado y disponer de personal totalmente cualificado a bordo, es vital para salvar vidas.
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