La importancia de disponer de desfibriladores. En el mundo empresarial actual, donde la seguridad y el bienestar de los empleados son prioridades fundamentales, la presencia de desfibriladores en las empresas ha adquirido una importancia significativa.

En este artículo, exploraremos a fondo la importancia de disponer de desfibriladores en el entorno laboral, analizando los beneficios, las consideraciones clave y los pasos para implementar con éxito esta medida crucial de seguridad. Seguro que te resulta útil.

Importancia de los desfibriladores en el entorno laboral

El corazón de un negocio no solo radica en su productividad, sino también en el bienestar de sus empleados.

En situaciones de emergencia cardiaca, cada segundo cuenta, y tener un desfibrilador disponible puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.

Los paros cardiacos repentinos pueden ocurrir sin previo aviso, y la rápida intervención con un desfibrilador aumenta significativamente las posibilidades de supervivencia.

La presencia de desfibriladores en las empresas no solo es un acto de responsabilidad corporativa, sino también una medida que demuestra el compromiso con la seguridad y salud de los empleados.

Además de tener la capacidad de poder salvar vidas, esta inversión contribuye a crear un entorno de trabajo más seguro y tranquilizador.

¿Qué es un desfibrilador?

Un desfibrilador es un dispositivo médico diseñado para administrar una descarga eléctrica controlada al corazón, con el objetivo de restablecer el ritmo cardíaco normal en caso de arritmia o paro cardiaco repentino.

Esta descarga eléctrica, también conocida como “choque”, ayuda a corregir las alteraciones en el ritmo cardíaco y permite que el corazón vuelva a latir de manera coordinada.

Tipos de desfibriladores

Existen 3 tipos de desfibriladores principalmente:

  1. Desfibriladores Externos Automáticos (DEA):

Son dispositivos diseñados para ser utilizados por personal no médico. El DEA se encarga de analizar el ritmo cardiaco del paciente y, en caso de ser necesario, sería él mismo el que administraría la descarga.

  1. Desfibriladores Semiautomáticos (DESA):

Estos dispositivos, a diferencia de los anteriores (DEA), sí que requieren que el usuario active manualmente la descarga eléctrica después de recibir indicaciones del dispositivo. Por lo demás, tienen el mismo funcionamiento.

  1. Desfibrilador monitor médico:

El desfibrilador monitor de uso sanitario es un dispositivo que combina las funciones de un desfibrilador y un monitor médico.  Este tipo de desfibriladores son los que utiliza el personal sanitario cuando tienen que intervenir. En ningún caso lo podrá utilizar el personal no sanitario.

El propósito principal de un desfibrilador es interrumpir una arritmia potencialmente mortal, como la fibrilación o la taquicardia ventriculares, restableciendo así el ritmo cardiaco normal. Estos dispositivos son esenciales en situaciones de emergencia cardiaca, donde cada segundo cuenta para aumentar las posibilidades de supervivencia del paciente.

Es importante destacar que la administración de un desfibrilador debe ir de la mano con otras medidas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y atención médica de emergencia.

Además, la presencia de desfibriladores en lugares estratégicos, como empresas, aeropuertos, escuelas y otros entornos públicos y privados, puede marcar la diferencia antes de que llegue el personal médico especializado.

¡Recuerda! Según la curva de Drinker, por cada minuto sin respirar y en parada cardiaca, se reducen las posibilidades de recuperación en un 10%. Por lo tanto, en cuestión de 10 minutos, una persona en parada cardiaca reduce considerablemente sus posibilidades de recuperación.

¿Y cómo funciona un desfibrilador?

Los desfibriladores operan de manera sumamente sencilla, pero su impacto es de vital importancia: salvar vidas.

El dispositivo se encarga de analizar los ritmos cardiacos desfibrilables para, posteriormente, administrar una breve pero potente descarga eléctrica.

  • El desfibrilador analiza el ritmo cardiaco del paciente, a través de unos electrodos adhesivos y, mediante una descarga eléctrica, es capaz de restaurar los niveles cardiacos normales.
  • El ordenador del dispositivo lanza un aviso al operador sobre una posible descarga.
  • En el momento en el que el dispositivo emite la señal, el operador de DESA ejecutará la descarga (en caso de ser un DEA, sería el propio aparato el que realizaría la descarga de forma automática).

Algunos de los beneficios de disponer de desfibriladores en las empresas

Respuesta rápida ante emergencias

La respuesta inmediata a una emergencia cardiaca es crucial. Los desfibriladores permiten a los empleados brindar asistencia antes de que llegue el personal médico, aumentando así las posibilidades de supervivencia.

Mejora de la seguridad laboral

La presencia de desfibriladores crea un entorno laboral más seguro y tranquilizador. Los empleados se sienten respaldados y protegidos, lo que puede tener un impacto positivo en la moral y la productividad.

Cumplimiento normativo

Dependiendo de la comunidad autónoma y de las características individuales de cada centro de trabajo, disponer de un desfibrilador puede ser obligatorio. Cumplir con estas regulaciones no solo evita sanciones, sino que también demuestra un compromiso por parte de la empresa.

Contribución a la comunidad

Al disponer de desfibriladores, las empresas también contribuyen a la seguridad de la comunidad en general, ya que estos dispositivos pueden ser utilizados por clientes o personas en las cercanías, en caso de emergencia.

No hay que olvidarse del mantenimiento

Resulta que, si dispones de un desfibrilador en tus instalaciones, es fundamental que esté debidamente mantenido.

En Salvavidas contamos con un servicio de mantenimiento que incluye tanto una fase preventiva como una correctiva, completando así el círculo de la correcta gestión del desfibrilador.

Si quieres más información sobre cómo cardioproteger tu empresa o centro de trabajo, puedes pinchar aquí ¡Te animamos a dar el paso!

Además, para cualquier duda o consulta, puedes escribirnos a marketing@salvavidas.com. Estaremos encantados de poder ayudarte.