En este nuevo artículo te cuento qué es, por qué es tan importante y cuáles son los 3 pasos para utilizar un DEA. ¿Me acompañas?

Ante cualquier emergencia, cada segundo cuenta. Cuando se trata de una parada cardiaca, la rapidez y eficacia en la respuesta pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte. En este contexto, el desfibrilador (DEA) surge como una herramienta crucial para aumentar las posibilidades de supervivencia.

¿Qué es un DEA?

Un DEA o desfibrilador es un dispositivo portátil diseñado para diagnosticar y tratar la fibrilación y la taquicardia ventriculares, dos ritmos cardiacos potencialmente mortales que pueden llevar a una parada cardiaca.

A diferencia de los desfibriladores utilizados por profesionales médicos, los DEA están diseñados para ser utilizados por el personal no médico, lo que hace accesibles para cualquier persona en situaciones de emergencia.

¿Por qué es importante disponer de un DEA?

La importancia del DEA radica en su capacidad para proporcionar una respuesta rápida y efectiva en situaciones críticas. Cuando se produce una parada cardiaca, cada minuto que pasa sin tratamiento, se reducen significativamente las posibilidades de supervivencia. Para ser más exactos, la Curva de Drinker establece que cada minuto que pasa disminuye un 10% la posibilidad de supervivencia, marcando entre 3 y 5 minutos como claves en esta recuperación.

Los desfibriladores permiten a las personas cercanas a la víctima intervenir de inmediato, administrando una descarga eléctrica que puede restaurar el ritmo cardiaco normal.

Además de su facilidad de uso, los desfibriladores tienen la ventaja de poder ser instalados y desplegados en una amplia variedad de entornos, desde espacios públicos como aeropuertos y centros comerciales hasta entonos laborales y hogares.

La presencia de los desfibriladores en estos lugares aumenta las posibilidades de que una persona que sufra una emergencia cardiaca reciba la atención necesaria de manera oportuna.

¿En qué consiste la parada cardiaca?

Una parada cardiaca, también conocida como paro cardiaco, es una condición en la cual el corazón de una persona deja de latir de manera repentina e inesperada.

Esto significa que el corazón no está bombeando sangre al resto del cuerpo, lo que lleva a una interrupción inmediata del flujo sanguíneo hacia los órganos vitales, incluido el cerebro.

Las paradas cardiacas pueden ocurrir debido a una variedad de razones, que incluyen problemas cardiacos subyacentes como la fibrilación ventricular, la taquicardia ventricular, un infarto de miocardio (ataque al corazón), trastornos del ritmo cardiaco, así como otras condiciones médicas como ahogamiento, electrocución, traumatismos graves, entre otros.

Una parada cardiaca es una emergencia médica grave que requiere atención inmediata. Sin intervención rápida, puede resultar en daño cerebral irreversible e incluso la muerte en cuestión de minutos.

El tratamiento de una parada cardiaca generalmente implica la aplicación de RCP (Resucitación Cardiopulmonar) y el uso de un desfibrilador para reestablecer el ritmo cardiaco normal.

Los 3 pasos para utilizar un DEA

A continuación, te cuento los 3 pasos para utilizar un DEA de forma rápida, sencilla y efectiva:

  1. Encender el desfibrilador. Enciende el DEA y sigue las instrucciones proporcionadas por el dispositivo de manera clara y precisa. Por lo general, el DEA tiene un botón de encendido y una voz o pantalla que te guía durante todo el proceso paso a paso.
  2. Colocar los parches / electrodos. Una vez encendido, retirar la ropa de la persona afectada para exponer su pecho. Colocar los electrodos adhesivos en el pecho desnudo de la persona según las indicaciones del DEA. Por lo general, el DEA tendrá imágenes o marcas en los electrodos que indican dónde colocarlos correctamente. Adicionalmente, los desfibriladores suelen tener un Kit de primer interviniente, donde suelen incluirse tijeras, cuchillas de rasurar y gasas. Este Kit de primer interviniente ayuda quitar la ropa más fácilmente, despejar el exceso de vello corporal del pecho de la víctima o ayuda a secar el sudor.
  3. Seguir las instrucciones del DEA para la administración de la descarga. Una vez que los electrodos están colocados correctamente, el DEA analizará el ritmo cardiaco de la persona. Si se detecta una arritmia que requiere una descarga eléctrica, el DEA indicará que se administre la descarga. En ese caso, dependiendo del tipo de dispositivo, tendremos que pulsar nosotros mismos el botón de descarga, o será el propio desfibrilador el que la ejecute.

Si no se requiere una descarga, el DEA puede indicar continuar con la maniobra de RCP (Resucitación Cardiopulmonar) hasta que lleguen los servicios de emergencia.

Estos 3 pasos son simples pero fundamentales para utilizar el desfibrilador de manera efectiva en situaciones de emergencia cardiaca. Es importante recordar que, aunque el DEA está diseñado para ser utilizado por personal lego (no médico), siempre se debe llamar a los servicios de emergencias 112 antes de iniciar cualquier procedimiento de reanimación.

Como resumen…

En situaciones de emergencia, como una parada cardiaca, la velocidad y eficacia en las respuestas pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte.

En una parada cardiaca, el corazón deja de latir de manera repentina, lo que puede llevar a daño cerebral irreversible o incluso la muerte en minutos. El tratamiento mas eficaz es: utilizar maniobra de RCP + uso del DEA.

Los desfibriladores son herramientas cruciales en momentos críticos, diseñados para diagnosticar y tratar ritmos cardiacos potencialmente mortales.

Los 3 pasos para utilizar un DEA de manera efectiva y simple son: encender el DEA, colocar los electrodos según las indicaciones y seguir las instrucciones del dispositivo para administrar la descarga, en coso de ser necesaria.

Para más información sobre cómo utilizar un desfibrilador, puedes pinchar aquí.

Si tienes alguna duda o consulta sobre cardioprotección, mándanos un correo a marketing@salvavidas.com, estaremos encantados de poder asesorarte.