Parece exagerado hablar de Desfibrilador en guardería. Pero no lo es, ya que es imprescindible que nuestros pequeños estén protegidos
Pero, ¿por qué debería limitarse la prevención de enfermedades a los adultos? La salud de un niño puede verse afectada de por vida si no se le brindan los conocimientos necesarios sobre las enfermedades cardíacas y la prevención para librar la difícil batalla contra ellas.
Para ayudar a prevenir futuros ataques cardíacos en los niños, los adultos deben ser conscientes de la importancia de la cardioprotección y estar presente en la vida de sus hijos. Aprender sobre los factores de riesgo y cómo prevenir las enfermedades cardíacas en los niños puede contribuir en gran medida a su bienestar.
Tener desfibriladores en las guarderías garantiza que los niños estén seguros en caso de que suceda una emergencia o accidente cardíaco. Es imperativo que los niños se encuentren en un entorno seguro, por lo que debemos asegurarnos de que tengan acceso al equipo adecuado en caso de que ocurra lo peor.
Un DEA, o desfibrilador externo automático, es un dispositivo que ha sido diseñado para su uso en niños y adultos. Cuando se vaya a utilizar, es necesario ajustar su configuración tal como nos indicará el aparato.
Es mucho más probable que los niños que ven desfibriladores se familiaricen con ellos y aprendan qué hacer en caso de necesitarlo.
En las guarderías adultos y niños comparten espacios durante muchas horas, por eso es importante mantener estas espacios de convivencia como espacios cardioprotegidos. Normalmente para usar los desfibriladores en niños es necesario contar con un parche electrodo pediátrico que vendrá incluido con el aparato. Además, en muchas Comunidades Autónomas es obligatorio por normativa.